¡Hola! Bienvenidos una vez más al blog Creacción, poniendo la creatividad en acción. Hoy abordaremos la temática del ¿Para qué creamos?
Existen dos modos creativos universales: el modo de descubrimiento y el modo de invención.
- El modo de descubrimiento, está asociado a la investigación e Implica identificar elementos desconocidos en alguna entidad o contexto. Por ejemplo, descubrir las relaciones entre las emociones y los procesos neuroquímicos en el cerebro límbico.
- El modo de invención, es el que utilizamos para el diseño, la creación artística, las creaciones profesionales en los diferentes ámbitos en los que nos desempeñamos, el desarrollo personal, etc. Por ejemplo, el diseño de un nuevo vehículo, la creación de una pintura, de una novela, la creación de tortas de cumpleaños que canten la canción de cumpleaños feliz clásica, la creación de una estrategia específica para cambiar los estados de ánimo negativos a positivos, etc.
De acuerdo con esto, entonces; los seres humanos creamos para conocer el mundo que nos rodea con el propósito de entenderlo y aprovechar ese conocimiento para mejorar nuestro desempeño en la vida y bienestar, para resolver problemas en un sentido amplio, conocernos a nosotros mismos, expresar y compartir a través de la creación artística, nuestras emociones y visiones del mundo y, por qué no decirlo, en definitiva, para ser más felices.
Como ya he mencionado en artículos anteriores, la creatividad es una capacidad humana. Todos somos creativos en algún nivel. El desarrollo de la capacidad creativa estará dada fundamentalmente por factores medio ambientales, como la educación que recibimos de los padres, la familia, el colegio, las amistades, etc. Todas estas interacciones irán moldeando nuestra personalidad, nuestras creencias, nuestros hábitos, los cuales determinarán el nivel de desarrollo de esta capacidad. La creatividad no es un don divino, en el sentido que no está determinada per se, sino que se desarrolla. El cerebro de un recién nacido es un campo fértil donde todo lo que se planta y se practica en el tiempo, se establece y se desarrolla, independientemente de si es algo positivo o negativo. De ahí la tremenda responsabilidad que tienen los padres en nuestro desarrollo, ya que ellos son los que participan, durante más tiempo, en la siembra de creencias, hábitos, formas de hacer, de decidir, de resolver problemas y de todo aquello que nos forma como personas y que sin duda impactará nuestro desempeño durante la vida.
¿Pero cómo manifestamos esta conducta creativa que nos empuja a querer crear, conocer, entender, resolver y mejorar para ser más felices y gozar de mayores niveles de bienestar?
Con respecto a esto existe una propuesta de Irving Taylor que se encuentra bastante difundida que consiste en distinguir 5 niveles de creatividad o 5 maneras de manifestar la conducta creativa:
Desde lo más elemental a lo más complejo serían:
- Creatividad expresiva. Esta se apoya en una actividad espontánea y libre, sin relación a técnicas, aptitudes o habilidades. Es un medio de comunicación consigo mismo y con el ambiente.
- Creatividad productiva. Se dispone de aptitudes y habilidades, aparecen restricciones impuestas por el saber y el material, y se actúa con un propósito. El producto final posee un mayor contenido comunicativo.
- Creatividad Inventiva. Se logran inventos y descubrimientos gracias al desarrollo de relaciones novedosas, que evidencian gran flexibilidad y provocan sorpresa. Es un nivel propio de la ciencia y el arte.
- Creatividad Innovadora. Se produce una modificación de principios, que refleja una comprensión profunda del campo problemático. En este nivel se logran productos que alcanzan valor en ámbitos culturales amplios.
- Creatividad Emergente. En esta se crean nuevos principios. Es el nivel de mayor complejidad ya que no se modifican principios existentes, sino que se plantean nuevos parámetros, nuevas formas de pensar, o productos absolutamente desconocidos.
Y entonces, ¿Por qué y para qué creamos?
Creamos, porque esta capacidad es parte de nuestra propia naturaleza como seres humanos que participamos del constante flujo de creatividad del universo que es creativo y creamos simplemente para ser más felices.
Si logre inspirarte, comenta…
Un gran abrazo, Esteban
Una respuesta a “¿Para qué Creamos?”